Santa Rosa de La Pampa (km 600)
Primera experiencia “desmontando y montando” la carga de la moto. Tarea que en un par de días sería parte de la rutina del viaje, junto con la lubricación de la cadena, el desayuno y la carga de nafta. Desayuné temprano en el hotel, cargué nafta en la YPF a la salida de Santa Rosa y tomé rumbo al sur hacia Río Colorado. En este tramo hizo su aparición el fuerte viento patagónico, que estaría presente cada día de todo el resto del viaje. Así que a empezar a acostumbrarme. Provenía del sur, o sea bien de frente. También se alargaban las distancias entre poblados. No sabía aún que eso iba a ser lo normal de allí en adelante…
Una vez en Río Colorado y pasado el control zoofitosanitario, vino a mi encuentro Rogelio para guiarme hasta la casa de su papá, donde él ya tenía todo listo para salir.
Almorzamos algo y partimos. Yo venía ya con 350 km recorridos desde Santa Rosa y todavía nos quedaban unos 475 hasta Trelew, que sería nuestro destino final del día. Esos 825 km fueron el tramo más largo que recorrí en un día en todo el viaje.
Paramos en una estación de servicios YPF a la salida de Río Colorado e hicimos la primera de las colas que había cada vez que hay que cargar combustible en el sur. Al ser las distancias tan largas entre localidades, con la autonomía de la moto no podemos arriesgarnos a pasar por alto ninguna, ya que puede pasar que te encuentres con que al cargar nafta te digan que no ha llegado el camión de provisión de combustible y no consigas nafta. Afortunadamente nada de eso me ocurrió en todo el viaje. Pero por las dudas…
Se pierde mucho tiempo en cada carga de combustible. Algo que debería hacerse normalmente en 15 minutos puede demorar 40 minutos o más. Una de las ventajas de viajar de a dos motos es que mientras uno está haciendo la cola esperando para cargar el otro puede aprovechar para comprar algo o ir al baño tranquilo.
El trayecto desde Río Colorado hasta Trelew no tiene grandes cosas para comentar a excepción del aprendizaje de viajar con fuerte viento cruzado constante. A partir de San Antonio Oeste comenzamos a rodar por la ruta nacional 3 que es la que al finalizar nos llevará hasta la bahía Lapataia unos cuantos kilómetros más adelante.
No paramos ni en Las Grutas, ni en Puerto Madryn: no teníamos tiempo. Será motivo de otro viaje (espero), sobre todo Puerto Madryn y la península de Valdés.
Era de noche cuando llegamos a Trelew. Rogelio había hecho las gestiones para pernoctar en una parroquia aprovechando que sus instalaciones estaban desocupadas en el verano. “Desensillamos” las motos, armamos nuestros dormitorios en un par de aulas desocupadas, salimos a cenar a una pizzería, y luego a dormir. Había sido un día muy pero muy largo, al menos para mí, en ruta.